jueves, 2 de marzo de 2017

El jodido rock and roll de los Quireboys





No se hicieron mucho de rogar los conocidos en un principio como London Quireboys antes de volver a España para presentar un nuevo disco que es más una excusa para salir de gira que realmente un trabajo serio y con poso temporal, una práctica que, por otro lado, llevan tiempo explotando. 



Visitantes


Así pues, el pasado 18 de febrero, tras la actuación de los teloneros tulorenses Visitantes,  Spike y sus secuaces aterrizaron una vez más en la Sala Copérnico de Madrid, dispuestos a hacer lo que mejor saben, tocar rock and roll. Porque de eso se trata todo, de puro y jodido rock and roll, dejando a un lado unos dorados años noventa y alguna balada con aires ochenteros. 





Los británicos lanzaron uno a uno todos sus grandes éxitos para disfrute del personal, con buenas guitarras y Spike ejerciendo de maestro de ceremonias, su voz rota y sus movimientos se resisten al paso de los años. Son una fiesta, lo saben y lo sabemos. Todos. Por eso estábamos allí y por eso acudiremos sin pensarlo a sus próximas llamadas.





En el aspecto musical no estuvieron tan finos como en su anterior visita, con bastantes idas y venidas de su batería, y tampoco pudieron contar con un sonido demasiado bueno. Poco importó realmente, este grupo tiene la virtud de ser un remedio a todos tus males, todos tus problemas, aunque sólo sea durante un puñado de temas… Hits como ‘7 O’Clock’, ‘Hey You’ o ‘Sex Party’ se mezclan con palmas, bailes y cerveza, y bellezas como ‘I Don’t Love You Anymore’ o ‘Mona Lisa Smiled’ dan paso a sonrisas y miradas cómplices. Un cóctel infalible que nunca nos cansaremos de probar. El simple arte de tres palabras que tristemente cada día cuesta más encontrar.

There she goes again.








Madrid, 2 de marzo de 2017

Crónica y fotos por:
Pablo A. Martín, guitarrista de Tangerine Flavour


No hay comentarios:

Publicar un comentario